Varios

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Por Julián Schvindlerman

  

La conducta de Israel fue ética durante la guerra – 26/08/14

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Entrevista con Alta Voz (Perú)

En los últimos días, la situación en Gaza, si es que era posible, ha empeorado. Cualquier posibilidad de un cese al fuego permanente salió de la mesa cuando comenzó un nuevo intercambio de misiles. Hace unos días, también, tuvimos la oportunidad de entrevistar a Julián Schvindlerman, un analista político invitado a Lima por la comunidad judía.

Lo que está sucediendo entre Israel y el grupo Hamás, en Gaza, es un panorama bastante difícil de entender, por eso decidimos comenzar esta entrevista con una pregunta acerca de la naturaleza del grupo terrorista que se encuentra en el gobierno de Gaza.

Altavoz: ¿Cuál es la naturaleza de Hamás?

JS: Hay una definición estándar del terrorismo, desde el punto de vista académico y legal, y este es: que si uno mata a civiles deliberadamente, no accidentalmente, si uno lo hace con una finalidad política, si uno lo hace con un factor atrocidad muy elevado y hay en la búsqueda psicológica asustar a una sociedad, entonces esto califica como terrorismo. De modo que, lo que hace Hamás, que es atacar con intención y con violencia extrema a poblaciones civiles, lo califica como terrorismo.

No sólo esto, ellos mismos, los fundadores de Hamás, cuando nacieron en los años 80 publicaron el Pacto de Alá, donde han presentado su visión del mundo donde dicen lisa y llanamente que su objetivo es la destrucción del Estado de Israel. Su conducta durante esta guerra también marca el trazo, porque el Hamás atacó una población civil indefensa en Israel, mientras que expuso a la población civil palestina.

Altavoz: Ante esta respuesta surge, claro, la duda de cómo Israel está manejando la situación geopolítica en la que se encuentra: el surgimiento de enfrentamientos muy fuertes entre, por ejemplo, el gobierno Irak y el grupo ISIS, Boko Haram y el gobierno de Nigeria, Hezbollah en Líbano. ¿Cómo Israel entiende esta situación?

JS: Lo que a muchos les cuesta entender, sobre todo a la prensa, es que Hamás es parte de esta ofensiva del fundamentalismo islámico. Lo tienden a ver más como una cuestión palestina-israelí, pero en realidad Hamás es un grupo terrorista que ideológicamente está vinculado a al-Qaeda, a Boko Haram, ISIS ¿Por qué? Porque son grupos que tienen una visión extremista de la religión musulmán, que desprecian a todos los que no son musulmanes. La lucha de Israel contra Hamás, es la lucha de occidente contra el fundamentalismo religioso. Todo marca que hay una intolerancia que trasciende la disputa palestino-israelí.

Altavoz: ¿Cree usted que el fortalecimiento de estos grupos ha sido una consecuencia de la caída de los gobiernos autoritarios en la primavera árabe?

JS: Yo creo que las revueltas árabes comenzaron siendo unas protestas espontáneas y populares contra el orden establecido tiránico, pero con el tiempo se convierten en una lucha sectaria y eso es lo que estamos viendo ahora. Ya no tiene nada que ver con la democracia y la dictadura, si no es entre sunismo y chiismo. De modo que los que perdieron las revueltas árabes fueron los demócratas.

La ventaja de los autócratas árabes era que a través de la tiranía ellos preservaban una cohesión social que no existe. Al distenderse, esas fuerzas se liberaron y están peleando entre sí.

Altavoz: Antes de entrar propiamente al tema de la guerra, hay una duda que se mantiene hasta ahora. En el pasado, Hamás atacó similarmente a Israel (2008 y 2012), ¿Por qué esta vez sí respondieron?

JS: En el pasado, Israel fue cuidadoso porque no quería que la opinión pública se le ponga en contra y porque no quiere matar civiles, pero esta vez comprendió que no podía ya ser parte de este juego perverso, que había un elemento psicológico en todo esto. Tenía que quebrar a Hamás en la creencia de que Hamás puede seguir impunemente atacando a Israel. Del mismo modo, cuando hicieron la incursión terrestre quebraron otro gran tabú: Hamás sabe que Israel no quiere quedarse en Gaza. Todos dicen que Israel es un ocupante. No. Hamás comprende mucho mejor que gran parte de la opinión pública mundial que Israel no quiere estar en Gaza y entonces lo ataca y en algún punto Israel tenía que acabar con esa idea. Israel tuvo que entrar porque era necesario.

Altavoz: Luego de ver un poco la situación en la que se está desarrollando este conflicto, es difícil entender cómo Israel, siendo la potencia que es, parece estar perdiendo esta guerra, al menos en el campo mediático. ¿Cómo explica esto?

JS: Hamás es un grupo de unos 20 mil combatientes. Tiene un arsenal apreciable y una gran motivación. Sin embargo, esto comparado a lo que es Israel militarmente no es una amenaza. A la vez, no hay que minimizar el hecho de que Hamás logró poner en riesgo al 70% de la población de Israel.

La verdadera ventaja de Hamás en la guerra fue en el campo de la opinión pública, en el campo de la propaganda. Acá la prensa falló estrepitosamente en la cobertura y lo acaban de admitir. La Asociación de Prensa en Israel, que reúne a todos los corresponsales, acaba de emitir un comunicado en el que señala que Hamás no los dejó hacer su trabajo, los amenazó y los censuró. Esto explica parte de la impresión que todos han tenido sobre el conflicto en Gaza. ¿Haz visto imágenes de soldados de Hamás lanzando cohetes desde establecimientos civiles? Esto no se veía, no porque no existe, sino porque la prensa no pudo cubrirlo por el acoso del Hamás.

Aquí hubo un problema, el mundo le hizo el juego a esta estrategia de Hamás, una estrategia cruel en la que lo que hizo fue realmente muy grave. Porque lo que sucede tradicionalmente en las guerras es que uno busca proteger a sus ciudadanos, Hamás no hizo eso, Hamás los expone. Hubo casos en los que Israel advertía a la población en Gaza para que evacúen lugares que iban a ser atacados. Hay algo que se llama el golpe en la puerta, que son misiles que cuando impactan un edificio lo mueven, como un temblor, para que los ciudadanos salgan y luego envían los misiles de impacto. De modo que tomó un montón de precauciones sobre una población civil de una entidad hostil que lo está agrediendo. Es difícil encontrar antecedentes de esto. La conducta de Israel fue ética durante la guerra. Hamás dispara desde hospitales y escuelas. Los combatientes se mueven por los túneles subterráneos y dejan a la población civil desprotegida.

La opinión pública se centró no en la inmoralidad del Hamás, sino en la respuesta militar de Israel y dijeron: esto es una masacre. Obvio que es traǵico que hayan muerto tantos civiles palestinos. Lo que sí digo es que es muy importante entender el contexto.

Altavoz: ¿Ve un fin a este conflicto?

JS: En algún punto van a tener que tomar una decisión porque las peticiones de Hamás e Israel son irreconciliables. Hamás dice que quiere un puerto, lo cual es un reclamo exótico [para un grupo terrorista], que quiere un desbloqueo. Es interesante porque eso también implica a Egipto y Hamás no ha atacado a Egipto para exigir el desbloqueo.

Israel dice: mira, la razón del bloqueo es porque ustedes son terroristas, nos quieren destruir, contrabandean armas. Toda esta guerra fue para eso, el objetivo fundamental de Hamás no era destruir Israel, esta guerra fue para insertar la idea del bloqueo en la prensa, que haya un rechazo a Israel y una negociación que sólo es favorable para ellos. Este fue el objetivo de Hamás.

Altavoz: Entonces, por lo que usted dice, ¿Hamás ha ganado?

JS: Políticamente, sí. Claramente. Va a depender de lo que se firme.